Con la mafia hemos topado.

El mes pasado regresé de Argentina, y ademas del grato encuentro con los fieles de la comunidad también me puse al tanto de las novedades y en especial de la situación que nos aflige desde hace ya tantos meses.

Un poco de historia.

La Parroquia (Congregación Claretiana) firmó un contrato por la construcción de la Iglesia. Pagó absolutamente todo a tiempo y hasta el día de hoy no se nos autoriza a utilizarla en su totalidad. Tenemos una autorización verbal del encargado de la región municipal para celebrar la Eucaristía diariamente.

La compañía constructora ha presentado una demanda en donde nos exige el pago de doce millones de rublos en concepto de compensación por el aumento de precio de los materiales utilizados en la construcción. ??

Luego de tantas idas y venidas y con la ayuda de los abogados que se han contratado la Parroquia hasta el momento de escribir esta carta no ha obtenido ninguna solución. Ni ayuda de parte de la Gobernación, y menos aún de parte de la Alcaidía.

Se entiende:

El exdirector de la compañía constructora que en reiteradas ocasiones nos escribió cartas amenazantes en el caso de no pagar este "chantaje", no solo es amigo del círculo mafioso del Gobernador sino que además ha sido recientemente nombrado "ministro de planeamiento y vivienda de la ciudad de Murmansk" por el mismo gobernador!!

Es más, el colmo de la hipocresía y de la falta de educación: el mismo señor Meyenin (ex director y ahora ministro) es el que ha convocado últimamente una reunión entre la Parroquia y la compañía constructora, para llegar a un acuerdo amistoso. ??

Hemos recurrido en sendas cartas a la Presidencia en el Kremlin para que de alguna manera intercedan ante los derechos de los ciudadanos de esta pequeña ciudad.

Nos encontramos en la total soledad.

Hemos escrito al Obispo interesándole de nuestros asuntos, que son los suyos evidentemente, dado que esta Parroquia como en cualquier parte de la Iglesia Católica está bajo el cuidado de su Obispo.

Hemos logrado que escribiera una carta a la Gobernación de Murmansk pidiendo nos ayuden estos duros momentos que nos toca vivir.

No encontramos explicación a lo sucedido. Luego de haber pagado la suma acordada, aparece esta reacción de parte de la constructora que según parece ha querido incluso chantajear a diestra y siniestra a toda persona que quiera declarar en contra de la Parroquia.

Vergonzoso.

Lamentablemente, esto no ocurre solo en Murmansk.

Ocurre también en otras ciudades importantes de este inmenso país.

Pero la verdad de lo que ocurre, de lo que sucede, de lo que la gente vive a diario, se oculta sistemáticamente al mejor estilo soviético.

El discurso de estos poderosos y mafiosos, sigue siendo el mismo.

La vida en Murmansk, y nuestro problema, es algo insignificante.

Eso es todo lo que tengo para contarles queridos amigos.

Esperemos que este tiempo de cuaresma que dentro de unos días comenzamos nos ayuden a ver con un poco más de claridad qué acciones tomar, que desiciones tomar.

Atte. El Párroco.